A partir de esta jornada, Malón Literario decidió eliminar la opción del comentario. La idea no tiene un cariz censor ni mucho menos, sino tiene que ver con la idiosincrasia con que fue fundado este blog: intentar crear (tanto desde el arte como desde la crítica). A lo largo de estos 228 post (en algo más de un año), ML recibió toda clase de comments: palmaditas en la espalda, escupitajos, etc. Algunos nos gustaron, otros no, sin embargo creemos que, en definitiva, ninguno sumaba al concepto de espacio literario que imaginamos construir. Ojalá que esta decisión no los ofenda (creemos que reinará la indiferencia, ante todo). Está claro que esta fábrica clandestina de letras sigue abierta para todos aquellos que quieran escribir ex nihilo. Saludos. Hasta mañana.
