Miente

Ante uno de los titulares más berretas (y más mala leche) de los últimos tiempos publicado por un diario argentino ("Mientras escribe cartas, a González se le caen los ascensores", Crítica de la Argentina, acerca de la caída de un ascensor en la Biblioteca Nacional), Página/12 contestó con una editorial ("Mientras, mientras, que algo quedará") que deja en evidencia las mezquindades de un cierto tipo de periodismo.

Como respuesta al titular de Crítica (que increiblemente no explica su ironía en el interior del texto), se pegaron aquí algunas partes de la editorial de Página/12 (que se toma el laburo periodístico de contarle a sus lectores el significado del título del diario de la compentencia. ¡Ah!, Horacio González está involucrado intelectual y políticamente con el grupo de pensadores Carta Abierta; de allí todo el bardo).

Los fragmentos de la editorial de Página:

"Con el correr de las horas, los graves traumatismos de cráneos se convirtieron en contusiones y el desplome en caída libre del elevador pasó a ser un brusco descenso amortiguado por los frenos de seguridad (...) Es decir, un ascensor que se desplomara desde una altura equivalente a tres pisos tendría que haber quedado despanzurrado y sus pasajeros en un cuadro de gravedad extrema, cuando no algunos muertos. No ocurrió así y tampoco el director de la Biblioteca estaba escribiendo cartas mientras se le caían los ascensores (a él se le caían, no uno sino varios ascensores) como tituló aquella prensa farandulesca en una de sus portadas (...) Desde luego, nuestro periodismo de las marquesinas tuvo y tiene todo el derecho de apoyar a quien se le dé la gana; a lo que no tiene derecho es a mentir so capa de un incidente que el otro hombre, el redactor de cartas, con sus misivas en tiempo y forma procuró evitar".

¡Ojo!, lo dijo Lula

Lula dijo: "El Dios Mercado quebró por falta de control". También arremetió contra el FMI: "Se creían infalibles y decían que nosotros éramos incompetentes".

Che, se imaginan si eso lo hubiera dicho Cristina, Néstor o ¡cualquier presidente argentino! Le caerían encima con un yunque. Algunos insisten preocupados en decir que los medios no condicionan, sin embargo hoy en día funcionan como máximos desestabilizadores de cualquier democracia que no vaya en línea con lo que pretenden ciertos grupitos de elite. El periodismo, cómplice, es la contrucción de la Hegemonía más poderosa del establishment. Hace creer que los beneficios de unos poquitos son el interés de una totalidad.

Sobre este asuntó hay algo en Hacia el lento y dulce bicentenario: "La legitimación de la tele". Miralo.

"¡Denme otra cosa!"

Acá dejo las puntos salientes de la muy buena entrevista que Emanuel Respighi le hizo a Juan Pablo Varsky en Página/12, acerca de la radio y el paso de su programa a Rock & Pop.

"... Es errónea la lectura que se hace de que a cuanto más mensajes, más audiencia. A mí me encantaría ser parte del programa más escuchado, porque laburo para que me escuchen. De la misma manera que el hincha de fútbol se hace hincha de la hinchada, está pasando un fenómeno parecido en la radio: el oyente que se hace hincha de la audiencia".

"... Se sigue la agenda de los diarios. No hay lugar para la reflexión. Hoy, la reflexión que más se escucha es "¡qué barbaridad!". Hay conductores como Nelson Castro y Magdalena Ruiz Guiñazú cuyas reflexiones son idénticas a las de los oyentes. ¡Denme otra cosa! Esté o no de acuerdo, dame herramientas de pensamiento (...) El oyente está acostumbrado a tener razón. Se transformó en un cliente. Si no está de acuerdo en lo que uno dice, te descalifica".

Sin reloj

El tenis es un deporte particular. En general se suelen decir una serie de clichés, como por ejemplo: "es individualista", "el jugador está solo en la cancha", "no puede recibir indicaciones de su entrenador", etc. Pero siempre se ignora una cuestión fundamental que imposibilita que cualquiera sea jugador de tenis: es atemporal. El tenis carece de cronómetro. Los jugadores, si quieren ganar, tienen la obligación de ir para adelante siempre. La voluntad de poder es esencial en un deporte que no da lugar a la especulación, a la burocracia del reloj. Federer o Nadal lo saben: jamás se detienen, te pasan por encima.

En Buenos Aires o en...

La literatura urbana es universal. No importa demasiado si conocés (en vivo) o no la ciudad que el autor elige como escenario de su relato. No niego que una historia citadina es más placentera si se pueden percibir sensaciones vividas del lugar, sin embargo los libros bien escritos activan sentidos imaginarios de lugares nunca vistos.

Brubeck

Ayer compré un disco de Brubeck ("Dave Brubeck, Quartet Live"): $9.99. El precio se debe a que Leader Music (una compañía discográfica que tiene como artistas exclusivos a "Ráfaga, Antonio Ríos y la banda de sonido del programa '100% Lucha'", entre otros ), se encarga de armar compilados con temas y/o discos descatalogados (por eso lo barato). "Hay que escucharlos primero, porque algunos son una cagada", me dice el vendedor de Musimundo. Anoche lo puse en casa y está bien (eso sí: se luce más el cuarteto que el piano de Brubeck).

Dejo una reseña que escribió Faco Carmona para Malón Literario el año pasado (¿o en el 2007?) sobre el pianista de San Francisco. Clickeá acá y leela que está buena.

Mail a Cappe

Ahí subí tu post, Cappe. Justo fue la contracara de algo cortito que había escrito esta semana sobre Obama ("Obama hope"). Era algo pavo pero que se relacionaba (por lo opuesto) a lo que recién redactaste ("Obama no hope", le puse). Creo en lo que decís. Ninguno de nosotros es ingenuo para pensar que Obama, como presidente de Estados Unidos, va a cambiar cierto statu quo. Sin embargo siempre intento despegarme de cierta postura de "izquierda argentina" (sontodoslomismo). Obama es distinto a Bush: es mejor. Yo sé también que vos sabés eso. En fin (ufff, hace semanas que se me pegó el "en fin"... ¿será la edad?), la esperanza es lo último que se pierde. Puta, es una flor de frase. "La esperanza es lo último que se pierde" parece cliché de abuelo, pero el fin de la esperanza es la muerte... o la locura.

Obama no hope

Por Ariel Cappelletti

Muchos teóricos de la noticia (si cabe esta denominación), han dicho que “los medios construyen el acontecimiento”. La reciente asunción del nuevo presidente de Estados Unidos, es parte de esta afirmación teórica, mas allá de que realmente sea un acontecimiento de alcance mundial, en términos estrictos. Mucho se ha escrito sobre Obama, sobre todo en relación a las expectativas que genera su llegada a la Casa Blanca. "Cambio" es una de las palabras más repetidas. Además, sobran los juicios de valor: sobre su capacidad ejecutiva, su ascenso social- es decir, su caso concreto y realizado del sueño americano-, su vida personal y una larga lista de étceteras. Incluso sus hijas han sido atravesadas por la implacable lógica del marketing y sus dividendos monetarios, y son hoy dos simpáticas muñequitas morenas de plástico con las que otras niñas de carne y hueso juegan (si es que las niñas todavía juegan a las muñecas…) En fin. Dentro de todo lo leído y escuchado por estos días, recuerdo una frase de Chomsky, quien definió a Obama, como “un negro con alma de blanco”. Puede ser. Pero al menos para mí, la mejor definición, fue del propio “negro con alma de blanco”. Dijo que él, venía a mantener la posición de liderazgo (y por ende, de privilegio) que ocupa Estados Unidos en el mapa geopolítico mundial. ¿O que esperaban?

Entusiasmo

Una personalidad entusiasta puede ser vencida. La curiosidad es aniquilada si no encuentra un feedback. Kubrick en "2001, una odisea del espacio" es claro al respecto: los monos se motivan unos a otros por imitación, al descubrir que un hueso podía funcionar como instrumento. Hasta la persona más predispuesta choca contra un muro si, en un mismo espacio, el feedback (verticalista muchas veces) es sólo pobreza. La voluntad del sujeto está en nunca parar de buscar devoluciones satisfactorias.

Si ellos lo dicen

"Moreno trabaja para dividir el frente agrario", publicó Clarín hoy en tapa. Borges contaba que Goethe decía que no era necesario antedecir "yo creo", "para mí" o "yo pienso" cuando uno expresaba una opinión: es redundante, relataba. Ya se sabe que la "verdad" que uno enuncia es subjetiva. Sin embargo en los diarios es impactante encontrarse con afirmaciones editoriales disfrazadas de información real, "objetiva". "Moreno trabaja para dividir el frente agrario" es la opinión de Clarín. Aquí Borges diría que el lector es el que debe darse cuenta que el sujeto que manifiesta esta posición es el diario; sin embargo en el periodismo el contrato de lectura es otro: informar. Subjetivamente, pero informar. En este ejemplo que describimos se confirma que la "noticia" es en realidad una postura del propio diario; ¿pero acaso a alguien le importa?

Playa o arenero

El otro día me encontré con una editorial sobre las playas PRO (Playa Poquito, publicada en Crítica). Fue de lo poco que se escribió (seriamente) sobre el tema. El resto: pura condecendencia. Para empezar, el artículo de Fernanda Sández grita a los cuatro vientos una idea que a todo el mundo de los medios pareciera haberle pasado inadvertida: ¡esto es un chasco! Desde adentro quiero decir que en general se está perdiendo una característica que, quiero creer, alguna vez tuvo el periodismo: el sentido común. Hace un rato comentábamos como cada vez más los medios de comunicación están haciendo periodismo para Doña Rosa (hoy denominados "comentaristas"). Se está pensando el periodismo para freakis. Una aclaración (no es la primera vez que se hace desde acá): ¡los comentaristas no son los lectores! La repito: ¡los comentaristas no son los lectores! ¿Se imaginan si todas las personas que miran la tele, escuchan la radio o leen los diarios fueran como Doña Rosa o comentaristas de portales de noticias de Internet? Nos tendríamos que cortar las pelotas. Tendríamos que empezar a escribir definitivamente para pelotudos. "La gente", aunque muchos no lo crean, no es boluda. Termina dándose cuenta de las cosas. Si a todos les decis que pusieron una playa en Buenos Aires tal vez al principio digan "qué bueno". Pero después van a decir, "perá perá, esto es un paseo y alguna que otra reposera frente al río". Absorbidos en la vorágine de marketinear las noticias, el periodismo muchas veces se despega del sentido común y monta una función de circo que tarde o temprano finaliza.

Información objetiva

La tarde de TN (de 19 a 20... cito de memoria): diálogo en vivo (¡en el estudio!) con el taxista que fajaron por querer pasar un piquete; cobertura de la conferencia de prensa de Buzzi tirando amenazas contra el Gobierno, entrevista exclusiva con Llambías, móvil desde la clínica donde operaron a De Angeli (de una boludez, calculo, porque charló él mismo), adelanto de "A dos voces" por Silvestre... Y, por supuesto, el tiempo.

Obama hope

Aretha Franklin, U2, Stevie Wander, Bruce Springteen, Shakira. No todo es guita, boys. Para Camus creer era tener "esperanza". Creer es el colchoncito en el cual nos acostamos a dormir la siesta mientras disfrutamos de un disco sin pensar en la industria discográfica.

Buena frase:

"los medios enriquecen y dan éxito a aquellos periodistas que le son fieles" (publicada en Blog de Contenidos).

FX de verdad en Gaza

Buena foto.

"Un hombre afortunado"

En el laburo charlamos con un compañero sobre las biografías de personajes políticos. Mi prejuicio es el siguiente: el oportunismo es más fuerte que el periodismo. La fugacidad con la que los protagonistas de ocasión pasan por los medios obliga a la industria editorial a acelerar publicaciones. Para otro día será la discusión sobre el estilo literario que se elige, aunque para ello debería perder tiempo en leer libros que, por el momento, no me interesan en lo más mínimo. Sigo con el apasible John Berger.

Fotocopias

Leyendo no sólo se construyen cuerpos lectores, sino que a su vez se crean sujetos lectores para libros bellos, pocket o fotocopias de centro de estudiantes. Está claro: el fetiche literario que tenemos impreso en nuestros nervios desalienta a leer apuntes fotocopiados (de tipos que, convengamos, tampoco colaboran con la causa).

Al agua

De chiquito fui toda la vida a la pileta pública (en realidad a la pileta de un club, que es pública si pagás). Nunca tuve pudor y realmente me divertía. Ahora (¿15 años después?) vivo en un edificio que tiene pileta. Acabo de subir (y bajar... la pileta está en la terraza). Esta mañana es la primera vez que asomé desde que empezó el verano. No había nadie, pero apenas estuve media hora. Con cortesía agarré mi libro de Philip Roth y las llaves y, apenas llegaron algunas personas, la dejé sola a Natalia tomando sol. No me gustan las piletas "públicas". ¿No soy más chiquito?

¿Los Beatles? naa

Domingo a la mañana. Escucho Parachutes de Coldplay. Escucho el tema Shiver. Me gustan. Canciones cortas. Sencillas. Cuando tocaron en el Rex Perfil publicó ¡en tapa! que eran "los nuevos Beatles". Nunca entendí ese arrebato. Ridículo.

Más sobre el tema

Para seguir un rato con el tema de los "Judíos Nazis" (pobre opinión que se populariza). Entrá acá.

Comparación odiosa

"Judíos Nazis". Es demasiado. Bombardear a un pueblo es decisión de un gobierno asesino, no Nazi. No emulemos a Carrió, cuidemos las comparaciones. Es verdad, la lógica puede que sea la misma. Una vez alguien me contó una anécdota: "Había un profesor que enseñaba en un colegio judío. Un día un alumno le preguntó 'qué era ser Nazi'. Para contestarle, el docente contó que en una oportunidad un estadista, de visita en una ciudad extranjera, recibió un disparo durante un desfile público. Ante el crimen se podía responder de dos maneras: 1) buscar casa por casa al responsable o 2) tirarle una bomba a la ciudad. Lo segundo es ser Nazi, señaló el maestro, quien jamás esperó que su alumno le contestara: 'igual que Israel'". Por supuesto, al día siguiente echaron al profesor. Con el relato se muestra que el pensamiento del gobierno israelí es igual al Nazi, sin embargo: ¿esa comparación en verdad es así? Pregunto: ¿en la crítica a Israel no existe un dejo antisemita? Como para el imaginario colectivo (reflejado en los medios de comunicación) vale más la vida de un soldado norteamericano que la vida "X" de un iraquí, en el conflicto de Franja de Gaza, ¿no pareciera que es peor el asesinato de un judío a un árabe que el asesinato de un árabe a un judío? Ya sé, el bienpensante dira que todo crimen es condenable, pero, con sinceridad, ¿no molesta más en el "buen sentido" gramsciano la matanza perpetrada por un Estado judío que por cualquier otro Estado? Pregúntenselo.

¿Cada vez se lee menos?

siempre me obsesionó mirar quién está leyendo en los subtes. No importa que esté absorto en mi propio libro, siempre me fijo cuántas personas están hojeando algo. Ahora mi laburo clasificatorio se amplió: diferencio mujeres y tipos. Intuitivamente pensaba que (en los subtes, en en los trenes y en los bondis) los chabones leían más que las minas, pero el trabajo empírico me está demostrando lo contrario.

Per ferie?

Mirándose el ombligo

Es algo que seguro deberá ser discutido con más profundidad, sin embargo tener un blog te permite cagar diarrea sin demasiada elaboración. Es más, diría que la premisa de cualquier blogger es escribir a las apuradas, sin detenerse; casi citando a Borges: publicar para nunca corregir. Me pregunto si presentar un blog como un espacio doctrinario tiene sentido si el "x".blogspot en cuestión es apenas una acumulación de tipos que escupen opiniones ausentes de un devenir colectivo.