lunes, 19 de mayo de 2008

Sensaciones radiofónicas*


Secreto de radio descubierto el sábado: no charlar con los compañeros antes de que empiece un programa (se desperdician temas de conversación). Qué se puede decir de la radio. Nada. Sólo que da placer hacerla si se está descontracturado. No es cuestión de ser "natural" ante el micrófono. En la radio es necesario actuar, adquirir un personaje. De uno mismo, tal vez. Pero un personaje, al fin. Es ridículo pensar que el que está dentro de una radio es tal cual es. Es mentira. Todo, de alguna manera, está guionado. La producción es fundamental para laburar bien. Esa producción es la que le quita naturalidad a la radio. Pero no entiéndase ésto como malo. Perder la naturalidad es común en la actuación (en el teatro, en el cine... en la radio). Definitivamente se debe perder cierta espontáneidad cuando se está conversando con orejeras como auriculares rodeado de papeles. Esa falta de naturalidad es la que le da credibilidad a un programa. Esa actuación es lo que da apariencia de "un programa entre amigos" a un programa entre amigos.

*Manhattan (no sé lo que quiero pero lo quiero Jazz) se puede escuchar los sábados de 19 a 21 por Internet en ciclopradio).